Cuando la gente se mira de verdad, puede llegar a descubrir mundos. Los ojos de las personas son como el espejo en donde se reflejan las emociones y los pensamientos mas sublimes. Cada una tiene una carta de presentación en su mirada, que dice la verdad, que dice quienes somos en realidad.
Para saber realmente quién es el otro, uno lo mira de frente, lo analiza, lo retiene en su mente, lo incorpora...y en general lo que mas nos llama la atención es su mirada, la manera con que ésta expresa el deseo del otro, sus miedos, sus sentimientos.
El aspecto de las personas y lo material se vuelve insignificante cuando nos detenemos a ver, de verdad, en los ojos del otro.
Descubrimos algunas cosas en la mirada ajena, cosas que no sabíamos y que los ojos nos cuentan...Tal vez hasta podamos ver un mas allá de todo, una pizca de sinceridad en los mentirosos, un poco de miedo en los duros y valientes, amor en los insensibles...Hasta quizá nos cuenten acerca de otras vidas, del pasado de nuestras almas y nos demos cuenta que nos conocíamos de mucho antes.